En la colonia Francisco Villa Vieja se vive un serio problema de salud pública por la presencia de perros callejeros infestados de garrapatas, situación que ya está afectando directamente a las viviendas de los vecinos.
Una habitante de la zona denunció que su vecino alimenta diariamente a los animales, lo que provoca que permanezcan en el lugar sin ningún tipo de control sanitario. El resultado: una plaga de garrapatas que ya invade los porches y patios de las casas.
“Ya se me están metiendo a la casa, incluso mi hija vio cómo estaban en el porche. Hablé a la perrera y no contestan”, relató con evidente molestia la vecina afectada.
La presencia de garrapatas representa un riesgo grave, no solo para las mascotas de la colonia, sino también para las familias, pues estos parásitos son transmisores de enfermedades que pueden afectar tanto a animales como a seres humanos.
Pese a los reportes, vecinos aseguran que no han recibido respuesta de la perrera municipal ni de las autoridades encargadas del control animal, dejando a la comunidad expuesta a un problema que crece día con día.
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