Chihuahua capital vibró durante cuatro días con el encuentro internacional Napawika Omowabo, donde pueblos originarios de América compartieron su herencia cultural.
Desde Perú hasta México, comunidades como los Quechua, Asháninca, Rarámuri y Maya se reunieron en la Plaza Mayor para celebrar su diversidad a través de danzas, ceremonias ancestrales y expresiones artísticas, destacando la participación del músico Romeyno Gutiérrez con una fusión de piano y chapareke.
El evento, organizado por la Secretaría de Pueblos Indígenas, incluyó rituales como el Sekáti Newárame para comercio justo de artesanías y la emblemática danza de los Voladores de Papantla.
La gobernadora Maru Campos reforzó así su compromiso con los pueblos originarios, mientras Lauro Hinostroza García de Intampac Perú-México destacó la importancia de preservar estas tradiciones.