«Rojo Amanecer», la película que narra los hechos del 02 de octubre

Oct 2, 2025 | Espectáculos

El cine no solo ha servido como medio de entretenimiento, sino también como un vehículo para retratar los hechos que han marcado profundamente a la sociedad a lo largo del tiempo. Ha sido una herramienta de crítica y reflexión sobre el entorno social y político. Tal es el caso del largometraje Rojo Amanecer, estrenado en 1989, que aborda de forma valiente y conmovedora la matanza de estudiantes ocurrida el 2 de octubre de 1968 en la Plaza de las Tres Culturas, en Tlatelolco, Ciudad de México.

Dirigida por Jorge Fons y protagonizada por María Rojo y Héctor Bonilla, la película narra la historia de una familia de clase media que habita en uno de los edificios cercanos a la plaza, y cuya cotidianidad se ve trastocada por los hechos trágicos de esa tarde. La cinta refleja no solo la violencia del Estado, sino también las tensiones internas de una familia atrapada entre generaciones, ideologías y miedos, en medio de un momento histórico que marcaría a México para siempre.

Realizada con recursos limitados y en un contexto político aún represivo, Rojo Amanecer enfrentó numerosos obstáculos para su producción y difusión. Fue filmada sin la autorización oficial de las autoridades, y una vez concluida, sus creadores decidieron resguardarla por temor a que fuera censurada o incluso destruida.

Aunque finalmente obtuvo el permiso del RTC de la Secretaría de Gobernación, su estreno se retrasó hasta 1990. Antes de su exhibición pública, el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari revisó personalmente la cinta y solicitó la eliminación de varias escenas en las que el Ejército Mexicano aparecía comprometido. Los realizadores accedieron a estos recortes para permitir su estreno, aunque la versión original sin censura logró difundirse de manera clandestina.

El impacto de Rojo Amanecer fue inmediato. La película obtuvo diversos reconocimientos, entre ellos el Ariel a Mejor Película, consolidándose como un hito del cine mexicano. Más allá de sus premios, abrió una puerta simbólica: la del cine como espacio para narrar las historias silenciadas por el poder, y como un acto de memoria frente al olvido impuesto.

Juan Pablo Macias

Conductor y Reportero en Nuestras Noticias.

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