En las calles entre personas de a pie; en la parada de camión, taxistas y vendedores de comida ambulante, coinciden de la inseguridad que priva en la ciudad de Cualiacan, destacan que el gobernador Ruben Rocha está apertechado en el propio Palacio de Gobierno, rodeado de agentes de la secretaria de seguridad pública federal y guardia nacional, que ha recibido dos atentados en contra de su vida y había salido herido de uno de los brazos, pero que los medios locales no publican al respecto.

Además comentan que en lo que van del año han ejecutado a serca de 50 policías tanto del Estado y municipales, y que la semana pasada mataron a un comandante. Un chófer de Uber destacó que en un reten le robaron 7 mil pesos y le quitaron 3 teléfonos que tenía para trabajar, por eso están molestos. No quiso ser grabado.

Otra persona que dió su opinión dijo que los policías en las calles no inhiben nada, porque siguen las ejecuciones y matanzas, que los ciudadanos se van temprano a su casa. Se pueden observar calles y parques vacíos. Negocios cerrados a las 7 de la tarde; cede la ciudad ante la ola de violencia en este poblado sinaloense.

Incluso cuando esta servidora pretendiendo comprar algo en un oxxo de la zona centro, éste estaba cerrado solo se atendió por ventanilla del local a las 7 de la tarde, y rodeado de unidades de la policía municipal que sin cortapisas nos cuestionaron a mí y a la persona que me acompañaba qué si veníamos juntos, ya que yo esperaba a algunos metros del lugar; pudiendoles generar sospechas de nuestra presencia. Unos agentes preventivos que de mal modo cuestionaron, y armados hasta los dientes.