El Departamento de Agricultura de Texas solicitó al Gobierno de Estados Unidos reanudar «de manera controlada» las importaciones de ganado mexicano, lo que representaría un alivio para los ganaderos chihuahuenses afectados por el cierre fronterizo.
La petición surge tras registrarse una caída del 9% anual en el inventario de ganado para engorda en Texas, principal destino de las reses chihuahuenses.
El cierre de la frontera al ganado mexicano desde septiembre pasado ha impactado directamente a los productores del estado, quienes dependen de las exportaciones a Texas para sostener su actividad económica.
Sid Miller, comisionado del Departamento de Agricultura de Texas, aseguró que recibir ganado mexicano es la mejor alternativa para contener el alza de precios de la carne en la temporada de engorda que va de noviembre a febrero.
El cierre se mantiene desde el pasado 21 de septiembre, cuando se detectó el primer caso de gusano barrenador en Nuevo León, a 112 kilómetros de la línea fronteriza con Texas.






0 comentarios