Chihuahua, la Locación que se Cansó de Ser Paisaje

Oct 24, 2025 | Espectáculos

En Chihuahua estamos acostumbrados a vernos como paisaje y no como historia. Siempre somos representados como el fondo del western, el desierto que adorna las grandes producciones, el horizonte que completa la toma, pero rara vez somos el centro de la trama. Por eso sorprendió que parte del rodaje de la película nacional Centurión, protagonizada por Poncho Herrera, se realizara aquí, en Chihuahua capital. Sí, leyó bien: no en las dunas, ni en la sierra, ni en los paisajes “de postal” que suelen representar al estado, sino en la ciudad, con sus calles comunes, su arquitectura práctica y su cotidianidad más cruda que cinematográfica.

El asombro fue general. No porque grabaran, sino porque lo hicieran aquí. En un territorio acostumbrado a ser “la locación exótica del norte”, que una producción eligiera la ciudad fue casi una declaración artística. Y es que el estado ha sido un escenario favorito de la cinematografía internacional: Las dunas de Samalayuca con Dune y Conan el Bárbaro, Ciudad Juárez en Man on Fire o Sicario como el paso de lo legal a lo ilegal, los paisajes áridos de Ojinaga en Fast Food Nation y Los tres entierros de Melquiades Estrada, y las incontables producciones filmadas en la Sierra Tarahumara, desde Tarahumara con Ignacio López Tarso hasta Cartas a Elena.

Pero Chihuahua no solo ha prestado su territorio, también ha dado talento, ¡Y vaya talento!. Desde el linaje fílmico de los Ripstein —con Arturo Ripstein, uno de los directores más influyentes del cine mexicano, heredando la pasión de su padre Alfredo nacido en la capital del mundo, productor de la Época de Oro—, hasta figuras como Gabriela Roel, María Sorté, Aarón Hernán, Alma Delfina, Evangelina Martínez, Lucha Villa, o incluso el eterno Anthony Quinn, orgullo nacional y uno de los 50 mejores actores de la historia del cine mundial.

Sin embargo, hay tres nombres que deberían estar en letras doradas del séptimo arte mexicano y que, por alguna razón, rara vez se mencionan cuando se habla de grandes:

Chano Urueta, el pionero total

Originario de la sierra, comenzó su carrera en Hollywood en los años 20 y fue un auténtico todoterreno del cine: actor, director, guionista, documentalista y productor. Fue el fiel ayudante de Chanoc en la adaptación fílmica de la historieta, participó en La Choca, dirigió Túnel 6 y colaboró con El Indio Fernández y Zovek. Antes de los “Gaeles” y los “Diegos”, Urueta ya había cruzado la frontera, sin alfombra roja ni reflectores, solo con talento puro y oficio. Fue, sin duda, un pionero que convirtió el desierto en estudio y el ingenio en su cámara.

Enrique Lucero, el rostro del destino

Quizás su nombre no le suene, pero si menciono a “La Muerte” en Macario o al cura en Canoa, seguro lo recordará. Capitalino de nacimiento, Lucero poseía un gesto duro, hipnótico, y una presencia que dominaba la pantalla. Actuó en Simitrio, Tiburones, El gallo de oro, Tarahumara, Las poquianchis y hasta en clásicos del western como The Magnificent Seven, The Wild Bunch, Butch Cassidy and the Sundance Kid, The

Long Goodbye o The Evil That Men Do. Compartió escenas con Yul Brynner, Steve McQueen, Paul Newman, Charles Bronson, Clint Eastwood, y fue dirigido por Robert Altman y Luis Buñuel. Pocos actores mexicanos en la historia pueden presumir semejante lista de créditos.

Roberto Gavaldón, el director que domó al cine de oro

Nacido en Jiménez, fue uno de los pilares más sólidos del cine nacional. Maestro en la dirección, forjó clásicos como Macario,nominada al Oscar como película extranjera; y trabajó con todos los grandes: Buñuel, Ismael Rodríguez, Gabriel Figueroa, Juan Rulfo y El Indio Fernández. En una época donde los genios abundaban, Gavaldón era el genio al que los otros consultaban. Con él, el cine mexicano encontró una voz propia, entre el simbolismo y la elegancia narrativa. Donde seguramente Don Roberto, llegaría mas lejos en este mundo actual en la dirección pasando, por mucho; a los tres amigos del cine “hollywodense”

El cine en Chihuahua tiene esa dualidad curiosa: se nos ve mucho, pero se nos reconoce poco. Quizás porque no hacemos escándalo, porque trabajamos más de lo que presumimos, o porque nuestros paisajes opacan a nuestra gente. Pero ahí están, las huellas en la historia del cine: directores, actores, técnicos y soñadores que nacieron bajo este mismo cielo y que encendieron el suyo propio en la pantalla.

Tal vez Centurión sea solo una película más. O tal vez sea la señal de que Chihuahua comienza a verse a sí mismo no solo como locación, sino como relato.

Julio C. Rodríguez Ornelas

Nacido bajo el signo de Tauro, Mercadólogo de profesión con más 15 años en el área de publicidad, comunicación y producción audiovisual. Asegura que las pizzas están sobrevaloradas y piensa que la gente ausente causa una mejor impresión.

Alfredo Martínez

Alfredo Martínez Sosa es Editor en Jefe de Noticieros Radiorama, donde encabeza el trabajo informativo con responsabilidad, liderazgo y compromiso hacia la audiencia. Con más de 20 años de experiencia en el periodismo, ha desarrollado una sólida trayectoria en medios de comunicación, destacando por su capacidad de análisis, su rigor profesional y su visión crítica de la realidad social y política de Chihuahua y del país.

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